Querido lector de porCausa, parte del trabajo de nuestra organización consiste en intentar hacer visible lo invisible, hablar de las realidades que no tienen cabida en la información del día a día y, en definitiva, lograr que el foco de atención recaiga sobre ellas y sus protagonistas sean escuchados. Ese ha sido el objetivo del informe Los peces perdidos de África occidental (Western Africa’s missing fish), publicado el pasado 29 de junio como fruto de la colaboración entre porCausa y el Overseas Development Institute (ODI).

Alfonso Daniels, Miren Gutiérrez, Gonzalo Fanjul, Arantxa Guereña, Ishbel Matheson y Kevin Watkins han elaborado el primer análisis sobre las actividades de los buques frigoríficos y procesadores que faenan frente a las costas del África occidental. Para ello han empleado la mayor base de datos de buques pesqueros del mundo, facilitados en exclusiva por la organización española FishSpektrum.

¿Cuál es la realidad sobre la que arroja luz el informe? La sobreexplotación de los recursos pesqueros en los mares del mundo ha provocado que numerosos caladeros estén reduciéndose y una alarmante cantidad de especies se vean empujadas hacia la extinción. La pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) es uno de los principales motivos de esta sobreexplotación. Hasta una quinta parte de las capturas pesqueras de todo el mundo proceden de la pesca INDNR, un elemento que vincula a los consumidores de Europa, EE. UU. y Asia con una práctica que está propiciando una tragedia global de la que África occidental constituye el epicentro.

El problema de la pesca perdida en las aguas occidentales de África tiene un impacto mundial, y prueba de ello es la repercusión a nivel internacional que el informe ha tenido en los medios y en la población global. En su primera semana de presencia en la Red se descargó 480 veces y alcanzó la cifra de 1.583 páginas vistas únicas desde la web del ODI. De estas descargas, el mayor número se realizó en Reino Unido, España, Estados Unidos, Francia y Bélgica, si bien también se produjeron en países como Nigeria, Noruega, Suiza o Senegal.

La lucha contra la pesca ilegal en África Occidental podría crear 300.000 puestos de trabajo

Mientras tanto, para el 15 de julio ya se habían publicado 136 reportajes sobre el tema que continuaron en aumento. La BBC titulaba: “Cómo los barcos traineros de China están vaciando los océanos de Guinea”, The Guardian se centraba en las cifras: “La lucha contra la pesca ilegal en África Occidental podría crear 300.000 puestos de trabajo” así como CNBC África: “Tomar medidas contra la pesca ilegal para proteger a millones de trabajadores en África occidental”.

En España la mayoría de los medios de comunicación también se han hecho eco del problema. Como recoge El Confidencial, las medidas adoptadas para controlar la pesca ilegal en esa zona del continente africano están abocadas al fracaso si las autoridades comunitarias no reforman la normativa vigente. Ante esta situación, como señala El País, “el informe no solo denuncia, sino que también hace un llamamiento a mayores intervenciones de los gobiernos regionales, conjuntamente con la inversión internacional, para establecer medidas disuasorias y sanciones para quienes se dedican a la pesca ilegal”.

Gracias a la difusión del informe estamos un poco más cerca de acabar con una realidad que, como señaló el exsecretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, en el informe «Cereales, pescado, dinero», produce devastadoras consecuencias sociales, económicas y humanas.

Se trata de una sobreexplotación de los recursos pesqueros que está destruyendo el sustento de los pescadores artesanales, está perdiendo una fuente vital de proteínas y provoca que estén desapareciendo oportunidades para el desarrollo de la producción y el comercio regionales, una realidad con un impacto mundial ante la que también las soluciones deben ser globales.