“Jurista equilibrista. Crecí haciendo #lobby en las ONG. Asesora de asuntos públicos y diplomacia corporativa”. Así se define Yolanda Román en su perfil de Twitter. La trayectoria de esta experta en comunicación pública se caracteriza por una continua labor de defensa de los derechos humanos y de la infancia, de la igualdad, la corresponsabilidad, la educación y de la conciliación de la vida familiar y laboral. Es directora de asuntos públicos en Inforpress y antes ha trabajado en Amnistía Internacional, donde empezó a colaborar en la Universidad de Deusto a los 19 años, y Save the Children. Sigue colaborando activamente con varias ONG.. Incidencia política, investigación y campañas, son tres conceptos claves de su perfil profesional y de su compromiso personal.
En línea con su interés por impulsar proyectos de valor social, Yolanda se ha convertido en uno de los fundamentales apoyos de porCausa, donde ejerce de pionera.
Hemos tenido la oportunidad de charlar con ella sobre su papel en porCausa, su trayectoria, y su visión de algunos de los temas que configuran la actualidad del entorno digital. A continuación, la entrevista.
¿Cómo conociste porCausa?
A través de sus fundadores. Sindo y Gonzalo son conocidos de hace mucho tiempo. Hemos compartido batallas en el sector social, hemos debatido juntos mucho sobre temas de actualidad, y por cercanía con ellos conocí porCausa desde el principio, desde que se estaba gestando.
¿Qué te ha impulsado a colaborar de manera tan activa en porCausa?
Creo que porCausa es un proyecto atractivo, en el que a mí me merece la pena invertir porque detrás hay dos cosas que para mí son básicas para cambiar el mundo o hacerlo un poco mejor por lo menos. Una de ellas es el rigor, creo que hay una intención y una vocación de mucho rigor, y otra es la pasión. Sabiendo quién está detrás y quién es el alma del proyecto estoy segura de que va a haber mucha pasión. Creo que estos son dos elementos para que el proyecto sea un éxito.
¿Qué consejos darías a porCausa?
Lo que espero ver es mucha independencia, que no dependan de nadie, ni en lo económico ni en ningún otro sentido. Porque eso es lo que les va a dar la capacidad de mantener el rigor de sus denuncias y de sus propuestas. Que no pierdan la ilusión y que sean rabiosamente independientes.
Dada tu experiencia en la comunicación pública, ¿qué crees que les falta a las ONG para comunicar mejor su labor a la audiencia?
Para comunicar bien hoy es importante tener buena información. Información de máxima calidad. Creo que eso se consigue con proyectos de investigación muy serios y muy rigurosos. Hace falta una información de calidad combinada con una manera de llegar a los públicos que sea atractiva y convincente. Pero creo que la base de la comunicación sigue siendo el contenido. Creo que es en lo que porCausa va a marcar la diferencia, porque el proyecto consiste en tener contenidos muy potentes.
¿Qué retos puede traer el formato digital a este proyecto?
Cualquier proyecto hoy de investigación o de incidencia nace ya en el entorno digital. El entorno es lo de menos. Creo que el reto es llegar al mayor número de personas y ayudar a dar las claves para que se entiendan los problemas y se puedan buscar las mejores soluciones. El reto no es la herramienta que se utilice, sino conseguir captar la atención y el interés de los públicos, que cada vez tienen más información y son más exigentes.
Has introducido el concepto de e-lobby, que defines como las políticas y las acciones que las organizaciones hacen utilizando Internet para generar presión y hacer incidencia política. ¿Cómo se puede conseguir que esta presión que se hace en las redes sociales llegue a las calles y se traduzca en medidas reales e iniciativas tangibles?
Las herramientas son muy útiles para conseguir movilización y presión ciudadana. No se trata de asegurarse que además salgan a la calle y se manifiesten, me da igual dónde lo hagan, en Facebook o en la calle, no veo la diferencia. Para mí la diferencia es que estas manifestaciones o cualquier movilización tengan unos objetivos de cambio claros. El ciudadano saldrá o no a la calle, pero hará más o menos ruido de manera eficaz si realmente está pidiendo o reclamando algo concreto, inteligible y viable. Creo que ese es el reto, no tanto dónde se desarrolle la movilización o la denuncia, sino que el objetivo esté bien definido para que la movilización pueda tener un impacto real.
¿Podrías darnos algún ejemplo de un e-lobby que esté teniendo impacto?
Hay muchos ejemplos. Muchas plataformas ciudadanas están utilizando de una manera inteligente y eficaz las herramientas del entorno online para denunciar, para proponer temas en la agenda política… Lo estamos viendo en algunos de los nuevos partidos políticos, también con diarios digitales que conocen ese entorno y sus herramientas y que realmente han desarrollado una capacidad de influencia general, no sólo en el entorno online, sino en la vida pública y política. Podemos, Eldiario.es, algunos partidos tradicionales también están utilizando muy bien esa herramienta, pero sobre todo son las plataformas ciudadanas como Civio o Politikon, o las grandes ONG que lo llevan haciendo mucho tiempo, como Intermón.
Has trabajado en ONG, en el sector público, y ahora estás en el sector privado… ¿Qué experiencias te llevas de cada modelo?
Hacer incidencia política en el sector terciario y en el corporativo es muy parecido, se trata de construir y desarrollar la capacidad de influencia para defender tus intereses, sean cuales sean, siempre legítimos. Del tercer sector destacaría la motivación y el entusiasmo a la hora de hacer las cosas y el rigor de muchas de las campañas, así como la constancia. Y del mundo corporativo me gusta especialmente la orientación a resultados y la buena definición de los objetivos. Creo que el trabajo es más eficaz cuanto mejor estén definidos los objetivos y más orientado esté el trabajo a conseguir resultados.
¿Qué nota le pondrías al nivel de transparencia de las instituciones públicas españolas?
En España es bajo en comparación con muchos países de nuestro entorno. Los ciudadanos, las instituciones, y los partidos políticos caminamos irremediablemente hacia una mayor transparencia en todos los ámbitos, pero seguramente los avances no son tan rápidos como muchos desearíamos. La Ley de Transparencia es un buen paso hacia delante, pero hay un largo recorrido todavía por hacer.
¿Hay alguno de los proyectos de porCausa en el que tengas un especial interés?
Sí, en mi trayectoria he mostrado un especial interés por la infancia, me interesa mucho lo que está haciendo porCausa sobre la pobreza infantil en España, y espero que desarrolle más proyectos centrados en la infancia, que suele ser el colectivo más olvidado. He puesto mucha ilusión y muchas esperanzas en el proyecto de porCausa y estoy convencida de que nos va a hacer mejores a todos, como sociedad. Porque estoy segura de que va a aportar análisis e investigaciones de mucha calidad. Creo que es un proyecto muy necesario.